miércoles, 25 de julio de 2012

Queratocono


(KC por sus siglas en inglés) es una enfermedad ocular no inflamatoria que causa que la córnea, que normalmente tiene forma redonda, pierda progresivamente grosor y adquiera una forma de pelota de fútbol americano, causando un abultamiento en forma de cono. En las primeras fases, el queratocono causa una ligera visión borrosa y distorsión de las imágenes y un mayor deslumbramiento y sensibilidad a la luz. En sus últimas fases, el queratocono causa una disminución de la agudeza visual y un deterioro visual importante. Esta distorsión ha sido comparada con la forma en la que se ven las señales de tránsito a través del parabrisas durante una lluvia fuerte.

¿A quién afecta el queratocono?
Los investigadores estiman que el queratocono afecta a 1 de cada 2000 personas. La enfermedad afecta por igual a hombres y mujeres y, que se sepa, no hay diferencias entre razas. Aunque se desconoce la causa del queratocono, los estudios sugieren que factores genéticos, alergias u otros factores medioambientales pueden contribuir a la aparición de la enfermedad.
Se diagnostica a menudo durante la adolescencia. Los síntomas normalmente aparecen por primera vez durante los últimos años de la adolescencia y los veinte y pocos años. El queratocono puede progresar durante 10 o 20 años y después progresar más lentamente. Cada ojo puede resultar afectado de forma distinta.

Causas del queratocono
La causa del queratocono es incierta. No se ha comprobado con certeza el papel de la herencia, y la mayoría de los pacientes con queratocono no tienen antecedentes familiares positivos.

Síntomas del queratocono
El queratocono suele presentarse entre los 10 y 20 años de edad, con deterioro de la visión en un ojo causado por la miopía y astigmatismos progresivos que provoca. El paciente puede indicar la necesidad de cambios frecuentes en la corrección de sus lentes no acusando tanto esta necesidad con el uso de lentes de contacto sobre todo en el primer estadio de la enfermedad.
Visión borrosa y distorsión de las imágenes, son los primeros síntomas del queratocono. En los primeros estadios, la visión puede estar solo ligeramente afectada, causando deslumbramiento, sensibilidad a la luz e irritación.
Cada ojo puede estar afectado aunque el grado evolutivo puede ser diferente. La córnea se va adelgazando y deformando con el desarrollo del queratocono ocasionando un astigmatismo cada vez más elevado que raramente puede ser tratado mediante lentes.

Tratamiento del queratocono
Al principio el uso de lentes de armazón es lo más usual. Posteriormente para corregir las irregularidades de la córnea y la mala vista por la miopía y astigmatismo, se utilizan los lentes de contacto semiduros o gas permeables. Al ya no corregir los lentes de contacto las irregularidades por muy alto astigmatismo y adelgazamiento corneal que puede provocar opacidades en la misma, y el lente llegar a ser intolerante, se necesitara realizar trasplante de cornea.

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lunes, 9 de julio de 2012

¡El verano esta aquí!

Aprovecha esta temporada al máximo con una vista sana

Es muy importante en esta época de verano proteger los ojos. Los principales factores que pueden dañarlos son: La exposición al sol y el cloro de las piscinas, así como la sequedad del ambiente y una deficiente protección a la hora de practicar determinados deportes.

Lentes de Sol

La excesiva exposición a las radiaciones solares está muy vinculada a intensificar determinadas afecciones como pterigion y, a largo plazo, cataratas o algunas lesiones de retina, enfermedades éstas últimas relacionadas con el envejecimiento.

Este factor se ve intensificado por el deterioro continuo de la capa de ozono, cuya función principal es la protección frente a las radiaciones ultravioletas lesivas para el ojo. De ahí la importancia del uso de gafas de sol, cuya finalidad, más allá del elemento estético, consiste en proteger de las radiaciones del sol, disminuir la probabilidad de deslumbramiento, y amortiguar la luminosidad solar. Todo ello sin afectar a la apreciación de los colores y al contraste de las imágenes.

Cabe resaltar que usar gafas de sol que tienen los cristales de color, pero que no protegen de las radiaciones ultravioletas, es más perjudicial que no usarlas. Ya que, al disminuir la luminosidad, la pupila se dilata quedando, por tanto, desprotegida ante las radiaciones ultravioletas y sus consiguientes efectos negativos para la visión.

Protección ocular en el deporte

Durante el verano aumenta la práctica de deportes, unos de estos pueden llegar a perjudicar a la persona si no se tiene el debido cuidado. Algunos de los deportes son los que utilizan pequeñas pelotas como el tenis, el racquetball o el squash en los que existe la probabilidad de recibir un impacto de la bola en el ojo.

El impacto puede llegar a provocar el estallido del glóbulo ocular, lesión mucho más grave que la de sufrir un corte en la superficie del mismo.

Por otro lado, en el ciclismo, la protección de las gafas puede evitar que los cuerpos extraños impacten y se alojen en el ojo. Asimismo, es recomendable el uso de gafas a la hora de practicar natación para evitar la irritación ocular debida a la cloración del agua.

Infecciones habituales en verano

Se trata de un período propicio para la transmisión de enfermedades oculares, ya sean bacterianas o víricas.

Entre las infecciones oculares más comunes, suelen encontrarse la conjuntivitis y la queratoconjuntivitis. Asimismo, son frecuentes los casos de irritaciones conjuntivales debido a una excesiva cloración del agua, por lo que es importante el uso de lentes o goggles de natación en las albercas, que incluso pueden estar graduados. Si aparecen síntomas como irritación o comezón, no se deben frotar los ojos ya que causará un aumento de la inflamación y de las molestias, lo mejor es acudir al oftalmólogo.

Nunca se deben utilizar lentes de contacto cuando se esté en el agua, sea del mar o de la piscina, ya que se pueden contaminar y causar infecciones muy graves en el ojo.

Sequedad del ambiente

Se produce, sobre todo, por el calor, en zonas alejadas del mar o por exposición prolongada al aire acondicionado. La sequedad provoca una mayor evaporación de la lágrima, dando lugar a la sensación de ojo seco o de cuerpo extraño, comezón, pesadez, ganas de tener los ojos cerrados. Es conveniente el uso de lentes de sol ya que impide que la lágrima se evapore. No obstante, si se sufre de estos síntomas durante un tiempo prolongado, se deberá acudir a un especialista para que prescriba el tratamiento más adecuado.

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